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6 febrero 2025

Desde el 16 de enero de 2025, la zona transfronteriza del Catatumbo vive una emergencia humanitaria que a la fecha deja más de 80 muertos y 11 mil personas desplazadas por enfrentamientos entre la guerrilla del ELN y el bloque 33 de las disidencias de las FARC, bajo este panorama, se hace urgente hacer memoria del conflicto armado, reconocer sus causas, identificar patrones de violencia y dar espacio para que las voces de las víctimas sean escuchadas.

 

Abogados sin fronteras Canadá acompañó el “Encuentro Internacional de Víctimas-Sobrevivientes de procesos Genocidas: Memoria Viva y Resistencia” en La Pista, vereda ubicada en la región del Catatumbo en Norte de Santander; durante dos días, familiares de víctimas, organizaciones sociales, comunidades indígenas y campesinas, defensores de derechos humanos, investigadores, académicos y abogados.as de Colombia y el mundo, se dieron cita para reflexionar sobre la importancia de la memoria en la búsqueda de Verdad, Justicia y Reparación. Este evento de reconstrucción de la memoria se desarrolló en el marco del proyecto Justicia, Género y Construcción de Paz, implementado por ASF Canadá y financiado por el gobierno de Canadá.

 

 

 

 

 

En 1999, La Pista en el Corregimiento de La Gabarra, se convirtió en un pueblo fantasma debido al recrudecimiento de la violencia en la zona del Catatumbo, mientras grupos paramilitares asesinaban indiscriminadamente a la población civil en espacios públicos, cientos de personas, especialmente campesinos e indígenas, fueron desplazados y desterrados de un territorio que hoy sigue siendo motivo de disputa entre grupos armados por el control de una ruta que es clave para el tránsito de drogas en Colombia.

 

 

 

Durante el encuentro, el foco de atención se puso en el Pueblo Barí, comunidad indígena que ha resistido a su exterminio desde la llegada de los españoles a Colombia en el siglo XVI y que hoy sigue siendo objetivo de confrontaciones entre grupos armados, lo que ha resultado en asesinatos selectivos, desplazamiento forzado, pérdida de sus territorios ancestrales y quiebres en su cultura y tejido social. Con una historia similar a la de los Barí, el pueblo indígena Mapuche en Chile también compartió sus saberes, las violaciones sistemáticas a sus derechos y las formas de resistencia que han encontrado para buscar justicia y sobrevivir a “procesos genocidas”.

 

 

 

La memoria colectiva es fundamental para entender cómo una sociedad construye su identidad a partir de los hechos del pasado. Entender el conflicto armado desde diversas perspectivas permitió que la comunidad de La Pista reflexionara sobre su historia y las lecciones que pueden aprenderse para evitar la repetición de estos traumas.

 

 

Dentro del “Encuentro Internacional de Víctimas-Sobrevivientes de procesos Genocidas: Memoria Viva y Resistencia”, liderado por el Equipo Jurídico Pueblos, se realizaron distintas muestras artísticas como formas de reparación simbólica, buscando visibilizar la resistencia de las comunidades campesinas e indígenas y resaltar la fortaleza de sus procesos organizativos en el territorio.

 

 

 

 

Abogados sin fronteras Canadá, reitera su compromiso y apoyo a la sociedad civil colombiana en su esfuerzo por avanzar en la construcción de una cultura de paz.

 

 

Linea de tiempo – Memorias del Catatumbo

 

Descarga la linea de tiempo

 

Siglo XVI

 

Primer contacto con los colonizadores

 

En el siglo XVI, los pueblos indígenas de la región del Catatumbo, como los Barí, comenzaron a tener contacto con los colonizadores españoles.

Un contacto violento, lleno de enfermedades y explotación.

 

Siglo XIX

 

Llega el campesinado al Catatumbo

 

El fenómeno de la colonización llevó a varios migrantes, especialmente del centro del país, a buscar tierras como la de esta zona, rica en biodiversidad y con una ubicación estratégica por su cercanía con Venezuela.

 

Siglo XX

 

Conflicto armado

 

A partir de la segunda mitad de este siglo, el Catatumbo se convirtió en una zona clave en el conflicto armado colombiano, involucrando a guerrillas, paramilitares y al ejército colombiano en disputas por el control del territorio.

Comienzan los desplazamientos forzados, las desapariciones, asesinatos y la continua violencia.

 

♦ 1960s – 1970s

 

Se intensifica la violencia en el Catatumbo, afectan- do especialmente a las comunidades indígenas que habitan zonas rurales estratégicas para el control de rutas del narcotráfico.

 

♦ 1980s

 

La región del Catatumbo, especialmente Tibú y La Pista, se convierten en áreas de control clave para los grupos armados. Durante este periodo, aumen- taron las incursiones empresariales para explotar re- cursos naturales como el petróleo, el carbón, el oro y el agua, lo que agravó, aún más, la situación de las comunidades locales.

 

♦ 1990s

 

Durante esta década, los Barí y el campesinado fueron nuevamente violentados.as por grupos armados ilegales y el ejército. La masacre de civiles, el uso de la población como escudo humano y la destrucción de sus viviendas, fueron elementos comunes en el continuum de violencia.

• La Pista de Tibú se consolidó como uno de los lugares más conocidos por su vinculación con la ruta del narcotráfico.
• Se perpetró una masacre por grupos paramilitares, se calcula que más de 20 personas fueron asesinadas en la zona de La Pista.

 

♦ 2000s

 

Implementación del Plan Patriota, estrategia militar del gobierno colombiano para combatir las guerrillas en la región del Catatumbo. Sin embargo, la presencia paramilitar también se expandió, generando aún más violencia en la región, con combates entre los actores armados y afectaciones directas a la población civil.

 

♦ 2010s

 

Tras la firma del Acuerdo de Paz con las FARC en 2016, las dinámicas de poder en la región cambiaron, pero a pesar de los esfuerzos de paz, la zona de Tibú y La Pista continuaron siendo un punto clave para los grupos armados ilegales que tienen como fuente de financiamiento el narcotráfico.

 

♦ 2020s

 

En la actualidad, la región del Catatumbo sigue siendo una de las más afectadas por el conflicto armado, con presencia persistente de grupos paramilitares y guerrilleros.

 

Siglo XXI

 

Continúa el desplazamiento y la masacre

 

Disidentes de las FARC y el ELN, se encuentran actualmente en una guerra entre bloques que, durante el mes de enero, ha dejado más de once mil desplazamientos forzados y 80 asesinatos, entre ellos varios firmantes de paz. *

 

*Fuente: Defensoría del Pueblo